Chillidos, desmesuras
afilando sus lenguas, delirios
exigiendo pureza,
acosando…
Voraces, cual marabunta,
irían hasta contra el Amado
que nos regó
una nutriente gota
de alegría
y una grande dosis de esperanza.
Tras sus aspavientos,
no aceptan paz
los embravecidos.
No aceptan otro sonsonete
que el raquítico catecismo
con el que los acomodaron.
Los fariseos,
siempre los fariseos.
The PlovdivLit site is a creative product of "Plovdiv LIK" foundation and it`s object of copyright.
Use of hyperlinks to the site, editions, sections and specific texts in PlovdivLit is free.